El Comisariado de Bienes Comunales del pueblo Tlahuica de San Juan Atzingo, exigen una base de la Guardia Nacional en Ocuilán ante la devastación clandestina de 5 mil hectáreas de bosque.
Son tres años en que los talamontes se han apoderado del bosque, de la comunidad indigena y ahora atentan contra los turistas y peregrinos que transitan por la carretera de las Lagunas de Zempoala.
Reportan que como consecuencia de la tala indiscriminada de los árboles de Ocuilán, el pasado 28 y 29 de septiembre, antes las fuertes lluvias se desgajó el bosque y ocasionó el cierre de la carretera.
Denuncian que a pesar de sus esfuerzos ni el gobierno estatal, ni el gobierno federal han hecho algo, y la tala dejará sin árboles y sin fuentes de agua a la comunidad.
Aproximadamente reportan que son 400 árboles de pino y oyamel los que se llevan a aserraderos del Estado de México, lo que les genera ganancias de más de 3 mdp a estos delincuentes.
Piden que los incorporen al programa federal «Sembrando Vida» y que se aplique todo el peso de la ley contra los que corten un árbol.