La afición de los diablos rojos del Toluca es una de las más nobles que existe en el fútbol mexicano, siempre recuerdan a sus leyendas de la mejor manera.
Esta vez fue el turno del uruguayo Vicente Sánchez, aficionados escarlatas realizaron un mural de su rostro en una pared del centro de la capital mexiquense.
El uruguayo se ganó el corazón de los escarlatas con sus grandes jugadas y goles que valieron para ganar títulos.
Agrupación el Rojo Capo los creadores de los murales
Esta agrupación de aficionados escarlatas se ha dedicado a pintar en varios puntos de la ciudad de Toluca murales con el rostro de históricos jugadores escarlatas.
Un mural puede tardar de 2 días hasta 3 semanas dependiendo de la dificultad de los trazos.
El mural más grande es el que se encuentra frente al estadio Nemesio Diez en él se pueden ver los rostros de Hernán Cristante, Vicente Pereda entre otros.
2 campeonatos de Vicente con el Toluca
Vicente Sánchez logró su primer título con los escarlatas en el 2002 cuando derrotaron a Monarcas Morelia 4-2 en el marcador global.
Su segundo título llegó en el 2005 de la mano de Américo Gallego en el antiguo estadio tecnológico.
En este partido el uruguayo marcó un doblete para darle un título más a la institución mexiquense.
Cardozo, Vicente Sánchez y Sinha ataque de miedo
Este trío de jugadores era un completo dolor de cabeza para las defensas rivales, goles asistencias y espectáculo era seguro en cada partido que participaban.
Sus grandes actuaciones llamarón la atención del Schalke 04 de Alemania equipo en el que tuvo un paso muy discreto.
Su estadía en el América
Después de un paso fugaz por Alemania el uruguayo regresó al fútbol mexicano para jugar con las Águilas de la América, algo que no gusto mucho a la afición escarlata.
Su nivel no fue el mismo, a pesar de haber sido presentado como un refuerzo bomba en las águilas no pudo demostrar su nivel.
Su amor por el Toluca
A pesar de haber jugado para las águilas el jugador charrúa nunca escondió su amor por el club escarlata incluso sueña con algún un día dirigir al equipo de sus amores.
EG