Muchas teorías y videos circulan por las redes sociales, en ellos se alerta a la población acerca de una tecnología peligrosa, la novedosa tecnología 5G.
Pero, ¿es realmente peligrosa para los seres vivos la implementación de esta tecnología?
La tecnología 5G, al igual que las tecnologías de comunicación anteriores se basan en la utilización de radio ondas que son parte del espectro electromagnético.
Estas ondas son transmitidas por antenas a dispositivos como el teléfono celular.
Estos campos electromagnéticos no solo se encuentran en los celulares sino en todos los dispositivos electrónicos de nuestro día a día.
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Así es, estamos rodeados de radiación electromagnética todo el tiempo, desde televisión hasta las señales de radio, incluyendo efectos naturales como la radiación solar.
La tecnología 5G funciona con altas frecuencias de onda que permiten que mayor número de dispositivos tengan acceso a Internet.
Este acceso puede también involucra la conexión de varios dispositivos al mismo tiempo y con mayor rapidez.
Entonces ¿Estas tecnologías ponen en riesgo nuestra salud?
En 2014 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que no se han encontrado efectos adversos en la salud causados por el uso de celulares.
Sin embargo, la OMS y la Agencia Internacional de Investigación de Cáncer, por sus siglas en inglés (IARC), clasificaron las señales de teléfono como «posiblemente cancerígenas».
Aunque comer verduras en escabeche y el uso de talco se encuentran en la misma categoría.
Por otro lado el consumo de alcohol y el consumo de carne procesada se encuentra en una categoría con un riesgo de cáncer aún más alto.
¿Por qué la tecnología 5G no se considera dañina?
Dentro del espectro electromagnético se encuentran distintos tipos de frecuencias, desde las frecuencias de radio hasta los rayos gamma.
Este espectro electromagnético se divide entre radiación ionizante y radiación no-ionizante.
La radiación ionizante es un tipo de radiación peligrosa que tiene la energía suficiente para romper el ADN y causar daño celular, menciona David Robert Grimes, investigador sobre cáncer.
Este efecto ionizante lo tiene la radiación ultravioleta, los rayos X y los rayos gamma que son comúnmente usados para efectos médicos.
Sin embargo el uso de tecnologías de comunicación en los celulares o la tecnología 5G no son parte de las frecuencias ionizantes.
Fuente: BBC.
