La Secretaría de Salud del Estado de México fortalece las medidas de mitigación y control de riesgos para la salud pública ante la pandemia de COVID-19.
Por medio de la vigilancia y verificación de establecimientos con venta de alimentos y supervisión de que los comercios no esenciales se mantengan cerrados.
La Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (Coprisem) es la encargada de efectuar estas acciones.
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La Coprisem ha recorrido los municipios de Atlacomulco, Ixtlahuaca, Acambay, El Oro, Jiquipilco, Jocotitlán, Morelos, San Felipe del Progreso, San José del Rincón y Temascalcingo, así como Jilotepec, Aculco, Chapa de Mota, Polotitlán, Soyaniquilpan, Timilpan y Villa del Carbón.
Gabriel O’Shea Cuevas, titular de Salud en el Estado de México, manifestó que en cada visita se recomienda la implementación de medidas higiénicas.
Dentro de las que se encuentra el uso de cubrebocas a todo el personal que ahí labora, la aplicación de gel antibacterial en la entrada de los negocios.
Así como la continua limpieza y desinfección de superficies y objetos de uso común.
También exhorta a los dueños al uso de cofia o red para el cabello y el constante lavado de manos con agua y jabón.
Dentro de las acciones que se han tomado en contra de los establecimientos que incumplan las reglas se encuentran las multas y suspensiones.
Se ha suspendido cuatro establecimientos por incumplimiento a las disposiciones sanitarias.
Los cuales corresponden a dos taquerías del municipio de Ixtlahuaca, una rosticería en Acambay y una panadería en Temascalcingo.
